Préstamos pymes: la demanda continúa

En el sector financiero afirman que la demanda sigue firme. Y que hay facilidades regulatorias para las pequeñas y medianas empresas.

 

La inestabilidad cambiaría, la suba del dolar y el intento de contener la tendencia inflacionaria hizo aflorar las quejas del sector Pyme, que advierte que las altas tasas de interés fijadas estarían frenando la demanda de crédito para capital de trabajo que requiere ese sector de la producción.

Por el contrario, el sector financiero indica que el stock de créditos para pymes e incluso mini pymes, contunúa creciendo en términos reales. Para realizar estas afirmaciones se basan en las  cifras de frecuencia diaria que brinda el Banco Central, que señalan que el stock de préstamos a las pymes se encuentra históricamente en su punto más alto.

Los préstamos del segmento pyme registran un aumento del 27% en términos reales (descontando la inflación) en 2017, llegando a un stock cercano a los 310.000 millones de pesos. Y la tendencia continúa creciendo. Según los datos disponibles hasta 31 de marzo del corriente año, el stock real de préstamos a las pymes aumentó en marzo un total de un 26% interanual.

Además, el flujo mensual de montos reales otorgados a MiPyMEs contunúa estable. El ritmo de dichos créditos se mantuvo en abril y en mayo, con desembolsos diarios que superaron los 2.000 millones de pesos. “Esto es un indicador de que el crecimiento del crédito a este sector sigue firme” dicen las fuentes bancarias.

A su vez, las estadísticas del Central aseguran que el crédito en general también sigue creciendo en sus distintas líneas: Los créditos comerciales en pesos crecen 3,1% en la comparación mensual (41% anual), los hipotecarios aumentan 8,1% mensual (160% i.a.) y los personales 2,8% mensual (52% i.a.)

Un dato que rescata el Banco Central es que los bancos tienen mayor flexibilidad a la hora de integrar encajes (inmovilización de efectivo) cuando el crédito tiene como destinatario una empresa mini pyme, ya que se les permite reducir los mismos en hasta tres puntos porcentuales en función de los préstamos que otorguen a MiPyMES. Esta rentabilidad adicional representa un subsidio por parte del BCRA para estimular el otorgamiento de créditos a las MiPyMES.

Esto representa una reducción de la exigencia de encajes que el BCRA le impone a las entidades financieras por $53.000 millones. Según señala la entidad, “a una tasa de interés del 40% como la actual, el subsidio implícito al conjunto de las entidades financieras por prestar a las MiPyMES alcanzaría un monto de $21.000 millones al año (a tasas en el orden del 26,5% como estaba antes la LEBAC más corta, $14.000 millones).”

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *